El público que le interesa visitar un edificio son  personas inquietas en general, que ven en el festival una oportunidad de descubrir una parte de la ciudad que o bien está siempre cerrada o no es de libre acceso, gente de todo tipo y de todas la edades, desde curiosos a profesionales, y que en general les interesa la cultura y la ciudad de Barcelona.

El festival se sitúa en el territorio el consejo es visitar lo que se encuentra más cerca. El festival quiere ser transversal a la sociedad y de aquí su implantación en todos los distritos, para que cualquier persona pueda encontrar desde la proximidad algo que valorar, querer y respetar.

La ciudad y su urbanismo son el marco de desarrollo para un individuo y la sociedad que lo acoge, siendo sus elementos de identificación personal y colectivos, cuanto mejor pueda reconocerlos, podrá en esta mesura identificarse e incidirá directamente en su autoestima personal y colectiva.

El arquitecto interviene y re-define la realidad de un espacio habitado actuando sobre los materiales, la luz, los colores. Sin embargo el usuario al utilizarlo en su manera personal cotidiana  va  adaptándolo a las distintas etapas de su vida.

El arquitecto reconoce que el público / consumidor puede llegar a crear con su comportamiento o sus preguntas un cambio en tus planteamientos a la hora de ejercer como arquitecto, su mediación crea una reacción en la arquitectura, el arquitecto autor, el que hace de guía de su obra o la de otros.

Un propietario puede llegar a enseñar su casa por vanidad y el arquitecto también por la misma causa puede enseñar su proyecto.

El público pregunta ¿el porque de las cosas?, no se imagina el proceso que hay detrás de la obra arquitectónica. El arquitecto comenta: “cuando poco a poco desvelas los procesos que han llevado a que la realidad sea esa y no otra, se percatan que a veces la simple utilización de la lógica y el sentido común permiten resolver los problemas  y que gracias al arquitecto que lo hace de forma creativa aquello es así y no de otra manera.
En este punto es dónde se dan cuenta de la importancia del trabajo del arquitecto. Es el único agente capaz de aportar creatividad y singularidad al resultado final. la realidad”.
Para otros la gracia de la arquitectura que por el solo hecho de estar, ya participas y la modificas.

El visitante intenta trasladar su experiencia personal a lo que están viendo y se sorprenden de que como la arquitectura influye en todas las acciones cotidianas.

Llegados a este punto se impone un esfuerzo en la comunicación de los procesos arquitectónicos al gran público; hecho que se llevo a cabo en el 48 Open House BCN, de los cuales es mediador.

El público que le interesa visitar un edificio son personas inquietas en general, que ven en el festival una oportunidad de descubrir una parte de la ciudad que o bien está siempre cerrada o no es de libre acceso, gente de todo tipo y de todas la edades, desde curiosos a profesionales, y que en general les interesa la cultura y la ciudad de Barcelona.

 

El festival se sitúa en el territorio el consejo es visitar lo que se encuentra más cerca. El festival quiere ser transversal a la sociedad y de aquí su implantación en todos los distritos, para que cualquier persona pueda encontrar desde la proximidad algo que valorar, querer y respetar.

La ciudad y su urbanismo son el marco de desarrollo para un individuo y la sociedad que lo acoge, siendo sus elementos de identificación personal y colectivos, cuanto mejor pueda reconocerlos, podrá en esta mesura identificarse e incidirá directamente en su autoestima personal y colectiva.

El arquitecto interviene y re-define la realidad de un espacio habitado actuando sobre los materiales, la luz, los colores. Sin embargo el usuario al utilizarlo en su manera personal cotidiana va adaptándolo a las distintas etapas de su vida.

El arquitecto reconoce que el público / consumidor puede llegar a crear con su comportamiento o sus preguntas un cambio en tus planteamientos a la hora de ejercer como arquitecto, su mediación crea una reacción en la arquitectura, el arquitecto autor, el que hace de guía de su obra o la de otros.

Un propietario puede llegar a enseñar su casa por vanidad y el arquitecto también por la misma causa puede enseñar su proyecto.

 

El público pregunta ¿el porque de las cosas?, no se imagina el proceso que hay detrás de la obra arquitectónica. El arquitecto comenta: “cuando poco a poco desvelas los procesos que han llevado a que la realidad sea esa y no otra, se percatan que a veces la simple utilización de la lógica y el sentido común permiten resolver los problemas y que gracias al arquitecto que lo hace de forma creativa aquello es así y no de otra manera.

En este punto es dónde se dan cuenta de la importancia del trabajo del arquitecto. Es el único agente capaz de aportar creatividad y singularidad al resultado final. la realidad”.

Para otros la gracia de la arquitectura que por el solo hecho de estar, ya participas y la modificas.

 

El visitante intenta trasladar su experiencia personal a lo que están viendo y se sorprenden de que como la arquitectura influye en todas las acciones cotidianas.

 

Llegados a este punto se impone un esfuerzo en la comunicación de los procesos arquitectónicos al gran público; hecho que se llevo a cabo en el 48 Open House BCN, de los cuales es mediador.

 


En el prólogo del libro  “Introducción a la arquitectura” que escribe Ignasi de Sola Morales encontramos:

“Ver la arquitectura entenderla y sentirla no es un acto inmediato. Requiere un aprendizaje. Si por escuchar música o leer poesía no es simple con una simple predisposición natural  con la arquitectura pasa exactamente igual.
Metáforas, ritmos, connotaciones múltiples del tesoro de la lengua que tan solo el instrumento afinado del poeta es capaz de desplegar delante nuestro.
En el caso de la arquitectura sucede algo parecido. Es una ingenuidad o una grosería pensar que todo es evidente. Que no hace falta aprender porque nuestra experiencia inmediata ya nos da  acceso a todas las riquezas posibles del espacio intencional que es la arquitectura. Bien al contrario, se aprende a  a ver y a sentir la arquitectura sobre todo repitiendo tantas veces como haga falta el esfuerzo de querer verla y sentirla.”

Si seguimos la propuesta de los trabajos de Antoine Hennion que nos propone la necesidad de elaborar una metodología de investigación basada en la mediación para analizar el campo artístico, aplicado en este caso a la arquitectura, tenemos que  el término festival de arquitectura designa entonces, más que un conjunto de visitas a todo tipo de construcciones, el nombre de un dispositivo que desde la escuela de arquitectura al espacio intencional, pasando por el ciudadano consumidor, transforma las mediaciones que unen a las personas a través de los objetos, y movilizan objetos a través de las relaciones humanas.
Es pasar de un análisis de las esencias a un análisis de las funciones y las relaciones.

Para la realidad festival los organizadores han mediado con la escuela de arquitectura, donde los profesores construyen la realidad arquitectura con sus alumnos. El guía que muestra un edificio hace de mediador entre unos planos y el edificio que enseña, creando la visita arquitectónica que es un acto performativo.  De esta forma, partimos de la idea de  objetos arquitectónicos que precisan de sus intermediarios  Por otra, los análisis estéticos topan con las resistencias del objeto de arte y el carácter irreductible de la obra.
Hennion, defiende la necesidad de reconstruir la oposición entre la representación que reconoce el objeto y la que lo atribuye a la creencia del grupo. El interés de la mediación consiste en plantear la cuestión de la relación entre los principios de la acción colectiva y el papel de los objetos. Sujeto y objeto se constituyen mutuamente.

Se habla de artificios como los planos, el diseño asistido por ordenador,  ¿Se ha preparado todo esto en base a unas motivaciones cambiantes, Cuanto de artificioso hay en realidad para apreciar según que cualidades del edificio. Todo se ve mediatizado también por la adaptación a las normativas cambiantes y la historia.
La desaparición del dibujo, las maquetas, los planos, frente al diseño directo en 3d, los ordenadores o el equipo de gente que los maneja. La experiencia definitiva sin embargo es la visita directa, la impresión particular que nos produce recorrerlo
La teatralidad, ¿es un espectáculo la arquitectura? La experiencia de habitar el mismo, la visita concertada, ¿Se puede apreciar la misma desde una maqueta o unos planos?
¿Los planos, las perspectivas, las fotografías, las maquetas, las nuevas tecnologías, han acabado con la  experiencia de habitar un espacio?, o la ha transformado, precisamente, en arquitectura librándonos del rito de visitar el edificio una vez construido.
Algunas de estas respuestas se encuentran en este festival de arquitectura.

En palabras de Hennion como los artefactos que intervienen técnicamente en la composición de una obra se enfrenta al ritual de la visita a un espacio. El diseño de un proyecto se basa en un lenguaje y, en definitiva, en un mensaje. Con el mensaje, las interpretaciones se multiplican y se hacen propias. Es el paso del grupo al individuo. El paso de la significación colectiva a la simbología personal. Las raíces del arte que, sumadas a las mediaciones, generan ideas e identidades diversas en nuestro seno a través de los artefactos culturales, el dibujo, los planos, el 3d, las maquetas , etc…son decisivas para fenómenos tan históricamente relevantes como el auge del individualismo y el consumo  y crecimiento cultural privado. El diálogo directo y personalizado con la cultura a través de nuestras predisposiciones, gustos, posibilidades… a través de unos mediadores tan capaces de uniformar como de fragmentar.

Los catálogos, las fotografías, las descripciones, imágenes y toda la información en la web del proyecto no son informativos respecto al público, sino performativos. La visita guiada es una mediación producto del arquitecto que explica la obra y el público asistente en la que ambos surgen en el momento mismo de esta relación. El edificio (como un actor vivo), los guías, voluntarios, y narraciones de expertos performan a cada instante en estos recorridos la arquitectura misma.

REFERENCIAS CONSULTADAS

Debates de la asignatura Tecnología, medios y cultura: las mediaciones. Innovación Cultural:  UOC/ Laboral
La pasión musical. Antoine Henion,  (2002).   Paidós: Barcelona.
Introducción  a la arquitectura. Ignasi de Solà-Morales y otros autores. Ediciones UPC

Los catálogos del festival, la web, las redes sociales son artefactos que informan al público y lo ponen en contacto con el festival. En ellos se encuentran las rutas y los datos gráficos y textuales de los edificios a visitar.

Los catálogos del festival son una buena tarjeta de visita del mismo, sirven para identificar datos de cada edificio, como son, el estilo, nombre del arquitecto, cuando fue construido o modificado, en que zona se encuentra, quien lo encargó o es el propietario, horario de visita, han sido impresos y repartidos en parte por el ayuntamiento como forma de colaboración con la organización. La ruta, el como llegar, google maps y la representación en la página web. Las fotografías también son muy importantes para hacerse una idea, una imagen, tanto en la web como en el catálogo. Los miembros del festival llevan las credenciales o identificadores colgados en el cuello que proporcionan un estatus de experto, de conocedor del tema, de formar parte.

En la calle, delante de cada edificio hay un gran cuadro con una flecha y el logo del festival que nos muestra el camino. Está situado en el suelo, algunos aún se conservaban días después.

Los arquitectos guía explican que para la experiencia arquitectónica es fundamental y insustituible en el proceso de entenderla y sentirla. Un proceso cultural que no es inmediato y en el que es necesaria una buena predisposición que se requiere de un aprendizaje, al igual que con la música y la poesía.

En el mundo profesional para transmitir un proyecto utilizan materiales gráficos: desde el dibujo de esquemas, bocetos, perspectivas 3D, maquetas, 3d, etc.., para enseñar un edificio al público también necesita elaborar un discurso que sea comprensible para la gente, con su poder de comunicación: la persuasión, herramienta que ya utiliza en su trabajo diario. En el mundo profesional el arquitecto intenta convencer de algo que aún no se ve “vendemos humo y eso no es fácil”.

A cada estudiante o voluntario además se le entrega un mapa plastificado único para cada distrito donde están representados cada uno de los edificios que componen un recorrido, para que lo muestren al público asistente.

Cada uno de ellos es fotografiado para dejar constancia de un momento único. La fotografía es un artefacto mediador importante como lo demuestra también la gran afluencia de personas con cámaras de fotos y el éxito de la propuesta Open Foto.

La ventaja del festival es mostrar una realidad tangible algo que se puede ver y habitar por unos momentos, antes ha sido lápiz y papel, plano, maqueta… Pero definitivamente para percibir verdaderamente lo mejor de todo es visitar la obra y/o habitarla como comentan los propietarios o los que la frecuentan como vivienda o trabajo.

Los voluntarios del festival OH son de varios tipos, pero todos con espíritu de colaboración y conciencia de hacer algo importante para la arquitectura y la ciudad: el arquitecto que explica su propia obra, un 85% estudiantes de arquitectura, pero también de otros ámbitos, los propietarios de los edificios, etc.
Es fundamental su implicación durante el festival, desde gestionar colas y listas, si son arquitectos a explicar el edificio,  y en una etapa previa al festival a elaborar materiales para su correcta difusión.

Las dos universidades públicas de arquitectura (La de Barcelona la del Vallés) proporcionan la mayoría de los voluntarios, la organización del festival contacta con los jefes de estudios, muchos voluntarios se enteran por sus compañeros, algunos  se enteran de dicho evento vía email.  Muchos se hacen voluntarios por los créditos de libre elección obtenidos en las diferentes tareas de colaboración del festival.

Los voluntarios son distribuidos y asignadas sus tareas por los organizadores del evento.  Entre los diferentes tipos hay los que ayudan durante el fin de semana del festival, los  coordinadores de zona pendientes de los problemas que puedan surgir. Los  voluntarios que explican los edificios  y hacen las visitas guiadas y  los  voluntarios que al pie de la calle  controlan la entrada de la gente si hay mucha o al contrario son los que hacen la difusión del proyecto a los ciudadanos que pasan por allá.
Hay voluntarios que han colaborado en una parte del proceso del festival, como los difusores del proyecto en el ambiente universitario.

En algunos destinos especiales como podrían ser instalaciones técnicas (el Supercomputador de la UPC o el depósito de retención de aguas del parque Joan Miró, son un ejemplo), había ingenieros especializados que presentaban las visitas.

El festival se cerró con una fiesta de homenaje a los voluntarios y participantes, hubieron discursos, música, danza, algo para picar y cerveza.

Al llegar observo un grupo de unas veinte personas de todas la edades, hay hasta un cochecito de bebé, se encuentran todos enfrente de la puerta que da acceso al recinto de las Caballerias de Gaudí. Hay una par de chicas voluntarias estudiantes de arquitectura organizando la visita, facilitan algún catálogo a quien lo solicita y responden a las preguntas que algunas personas les hacen. A veces algún curioso que pasa se une al grupo principal o a otros pequeños grupos.

Hay un presentador frente al grupo de gente, hablando y está explicando los detalles ornamentales de la gran verja, en concreto el detalle de una parte de las figuras de metal que hay en su superficie, habla de mitología y de dioses y de humanos, de dragones y de personajes míticos. Parece una charla de historia antigua sobre nuestros orígenes y las grandes cuestiones humanas de los clásicos. El presentador lleva cosido en su niki una etiqueta que pone “Ruta del Modernismo” y explica los temas con pasión. Varias veces hace moverse al grupo para ver el edificio desde diferentes vistas, siempre para comentar los detalles de la gran fachada que forman la puerta y las construcciones interiores que se atisban desde fuera.

El grupo sigue aumentando y continua el relato, comienza a hacerse quizás algo largo al menos para mí, quizás no tanto por el sol que molesta un poco e impide ver el edificio con claridad, como por la impaciencia que tengo en entrar dentro.

Por fin la puerta de la gran verja se abre y entramos todos. Estamos en el jardín y ahora la explicación versa más sobre la forma en que Gaudí planteó y fue construida su obra.

Pasamos dentro del edificio principal siguiendo al guía que esta vez explica los detalles del techo y de las columnas. Caras de admiración miran aquí y allá siguiendo el brazo del experto, alguno de los visitantes recorren mientras las salas adyacentes. Hay algunas personas haciendo fotografías, al menos dos de las cámaras son bastante sofisticadas con objetivos profesionales, van libremente fotografiando no solo vistas de la fachada sino incluso pequeños detalles.

Al final vamos todos otra vez al jardín junto a los voluntarios y salimos definitivamente a la calle, donde se han acumulado otro gran montón de gente esperando la siguiente visita.

La sala de actos del CaixaForum se está llenando, dos grandes proyecciones detrás del escenario con el logo del festival y una gran mesa alargada delante con las tres mujeres organizadoras del festival y alguna persona más de apoyo. Cerca del escenario hay muchas cajas que contienen los catálogos, donde se encuentran las rutas y los datos gráficos y textuales de los edificios a visitar. También contienen instrucciones de actuación, consejos y la credencial que acredita como miembro de la organización.
Este distintivo es un elemento importante tanto paras sentirse parte como útil para visitar cualquier edificio del festival sin esperas.
Un breve discurso inicial trasmite una serie de reglas básicas de comportamiento y consejos. El ambiente es entusiástico como el que comienza algo histórico, todo esto en la víspera del festival.
Van llamando uno por uno a cada estudiante o voluntario y le entregan su credencial y unos cuantos catálogos. También un mapa plastificado único para cada distrito donde están representados cada uno de los edificios que componen un recorrido, para que lo muestren al público asistente.
Cada uno de ellos es fotografiado para dejar constancia de un momento único.
Algunos de ellos, quizás se nota en la vestimenta y la edad, son arquitectos que mostrarán una obra construida, también recogen el material. Por lo visto a otros ya se les ha entregado el material días atrás.
Poco a poco la sala se va despejando y quedan un montón de cajas vacías y la sensación de que algo grande ha comenzado y ciertas miradas de cansancio y de inquietud en la organización…

El formato del festival 48h Open House Barcelona es conocer y entender que es la arquitectura en general desde la visita a algunos edificios de la ciudad. Para hacerlo posible principalmente se accede al espacio interior de los edificios, para luego en muchos casos salir a la calle para entender el edificio desde fuera y ver como se refleja el espacio interior en la fachada y como ésta y su volumetría se adaptan al lugar. Todo este proceso no se hace libremente, ya que es necesario  que se enseñe, un experto explica las características esenciales de esos espacios, su función y condicionantes de la obra. En cada obra visitada el usuario recibe unas nociones básicas de cada edificio, para hacer despertar su curiosidad y para ayudarle poco a poco a componerse mentalmente que es la arquitectura y la ciudad.

Las visitas en su mayor parte siguen un horario prefijado y su duración es variable ya que depende de los m2 del edificio y del arquitecto que lo explica.
Existen también itinerarios temáticos seguidos por profesionales entorno a la arquitectura o especialistas en esos ámbitos. Esta información juntamente a la ficha de cada edificio está disponible permanentemente para la formación y exploración continua del usuario de Internet.

El recorrido es muy importante en el festival, observar el mayor número de edificios según el tiempo disponible. Cada usuario prepara su ruta de antemano.  Mucha gente ha utilizado también la web donde se encuentran las rutas y las fichas informativas de cada edificio, descargando las rutas que coinciden con los 10 distritos de la ciudad de Barcelona. En la visita al edificio se forma un grupo principal que sigue atentamente al monitor, pero algunos se dispersan buscando otra mirada, otra perspectiva, un perderse un poco en la obra visitada. Las normativas municipales, la ordenación del territorio y el devenir de la historia, han sido también factores importantes a explicar, como  muestra de los procesos que hay detrás de la obra arquitectónica y las limitaciones y de que forma han influido en el proyecto.

En la primera edición se han cubierto las expectativas, el público ha visitado los edificios, solo, en familia, en pareja, etc. La gente ha quedado para ir al festival, ha hecho su propia ruta, a pie o en transporte público, en algún caso ha utilizado su transporte privado para acceder algún edificio un poco aislado y mal comunicado. El uso del espacio público se hizo con corrección y hubieron colas en algunos edificios, el uso del espacio privado fue respetuoso, hubo silencio y expectación cuando se realizaban las explicaciones y en algunos casos intervinieron preguntando dudas o reflexiones al arquitecto guía.

La organización el festival hace posible el proceso de participación colectiva desde la  participación ciudadana, el voluntariado y el patrocinio en un proceso abierto a toda la ciudad los días del festival, y desde internet y las redes sociales de forma permanente a todo el que esté interesado por la cultura arquitectónica, el diseño y la ciudad.
La dificultad inicial es poner de acuerdo desde diferentes vías, principalmente desde el contacto personal, a los propietarios, colaboradores, instituciones municipales, técnicos, arquitectos y voluntarios.
El  sitio web del festival, 48hopenhousebarcelona.org, es ya un sitio de de referencia sobre  arquitectura en la red, ya que ofrece información conceptual, gráfica y de situación de todos los edificios participantes en la pasada edición y también planos con los distintos itinerarios realizados abierto a consulta durante todo el año.

Durante días antes y en el tiempo en que transcurre el festival el usuario puede ser activo en el web, con sus comentarios y sugerencias sobre cada uno de los edificios del programa y sobre el festival. También desde las aplicaciones del web 2.0 facebook o twiter los seguidores de Arquitectura Reversible y del 48hopenhouse, pueden durante todo el año participar y seguir nuestras aportaciones sobre arquitectura en general y sobre Barcelona en particular.
Se ha realizado un plan de comunicación que incluye  la edición de postales, una guía de mano y la señalización del edificio a visitar.

Durante el festival se han ofrecido también una serie de actividades paralelas como   conferencias repartidas en tres edificios interesantes a visitar de la ciudad y que profundizaron en otros tantos temas arquitectónicos. También hubo un laboratorio de reflexión en otros tres edificios distintos, donde se promovió una reflexión dirigida a un público pre-inscrito y que ya había asistido a la visita guiada del edificio.
Otras actividades fueron, un recorrido en bicicleta por uno de los distritos de la ciudad y  un concurso de fotografía.
El festival termina con una gran fiesta de homenaje a los voluntarios en un edificio emblemático. Este año fue en la antigua fábrica de cervezas Damm.

El formato del festival 48h Open House Barcelona es conocer y entender que es la arquitectura en general desde la visita a algunos edificios de la ciudad. Para hacerlo posible principalmente se accede al espacio interior de los edificios, para luego en muchos casos salir a la calle para entender el edificio desde fuera y ver como se refleja el espacio interior en la fachada y como ésta y su volumetría se adaptan al lugar. Todo este proceso no se hace libremente, ya que es necesario que se enseñe, un experto explica las características esenciales de esos espacios, su función y condicionantes de la obra. En cada obra visitada el usuario recibe unas nociones básicas de cada edificio, para hacer despertar su curiosidad y para ayudarle poco a poco a componerse mentalmente que es la arquitectura y la ciudad.

 

Las visitas en su mayor parte siguen un horario prefijado y su duración es variable ya que depende de los m2 del edificio y del arquitecto que lo explica.

Existen también itinerarios temáticos seguidos por profesionales entorno a la arquitectura o especialistas en esos ámbitos. Esta información juntamente a la ficha de cada edificio está disponible permanentemente para la formación y exploración continua del usuario de Internet.

 

El recorrido es muy importante en el festival, observar el mayor número de edificios según el tiempo disponible. Cada usuario prepara su ruta de antemano. Mucha gente ha utilizado también la web donde se encuentran las rutas y las fichas informativas de cada edificio, descargando las rutas que coinciden con los 10 distritos de la ciudad de Barcelona. En la visita al edificio se forma un grupo principal que sigue atentamente al monitor, pero algunos se dispersan buscando otra mirada, otra perspectiva, un perderse un poco en la obra visitada. Las normativas municipales, la ordenación del territorio y el devenir de la historia, han sido también factores importantes a explicar, como muestra de los procesos que hay detrás de la obra arquitectónica y las limitaciones y de que forma han influido en el proyecto.

 

En la primera edición se han cubierto las expectativas, el público ha visitado los edificios, solo, en familia, en pareja, etc. La gente ha quedado para ir al festival, ha hecho su propia ruta, a pie o en transporte público, en algún caso ha utilizado su transporte privado para acceder algún edificio un poco aislado y mal comunicado. El uso del espacio público se hizo con corrección y hubieron colas en algunos edificios, el uso del espacio privado fue respetuoso, hubo silencio y expectación cuando se realizaban las explicaciones y en algunos casos intervinieron preguntando dudas o reflexiones al arquitecto guía.

 

La organización el festival hace posible el proceso de participación colectiva desde la participación ciudadana, el voluntariado y el patrocinio en un proceso abierto a toda la ciudad los días del festival, y desde internet y las redes sociales de forma permanente a todo el que esté interesado por la cultura arquitectónica, el diseño y la ciudad.

La dificultad inicial es poner de acuerdo desde diferentes vías, principalmente desde el contacto personal, a los propietarios, colaboradores, instituciones municipales, técnicos, arquitectos y voluntarios.

El sitio web del festival, 48hopenhousebarcelona.org, es ya un sitio de de referencia sobre arquitectura en la red, ya que ofrece información conceptual, gráfica y de situación de todos los edificios participantes en la pasada edición y también planos con los distintos itinerarios realizados abierto a consulta durante todo el año.

 

Durante días antes y en el tiempo en que transcurre el festival el usuario puede ser activo en el web, con sus comentarios y sugerencias sobre cada uno de los edificios del programa y sobre el festival. También desde las aplicaciones del web 2.0 facebook o twiter los seguidores de Arquitectura Reversible y del 48hopenhouse, pueden durante todo el año participar y seguir nuestras aportaciones sobre arquitectura en general y sobre Barcelona en particular.
Se ha realizado un plan de comunicación que incluye la edición de postales, una guía de mano y la señalización del edificio a visitar.

 

Durante el festival se han ofrecido también una serie de actividades paralelas como conferencias repartidas en tres edificios interesantes a visitar de la ciudad y que profundizaron en otros tantos temas arquitectónicos. También hubo un laboratorio de reflexión en otros tres edificios distintos, donde se promovió una reflexión dirigida a un público pre-inscrito y que ya había asistido a la visita guiada del edificio.

Otras actividades fueron, un recorrido en bicicleta por uno de los distritos de la ciudad y un concurso de fotografía.
El festival termina con una gran fiesta de homenaje a los voluntarios en un edificio emblemático. Este año fue en la antigua fábrica de cervezas Damm.

 

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Está organizado por la asociación cultural Arquitectura Reversible cuyo objetivo principal es la divulgación de la arquitectura y que actualmente se encuentra preparando la próxima edición.

El formato del festival está basado en visitas guiadas por especialistas de diversas áreas, especialmente arquitectos y estudiantes de arquitectura. En algunos casos esta figura ha coincidido con un propietario, un usuario del edificio, un técnico de la empresa ubicada en el mismo o incluso algún responsable de ordenamiento del territorio.

Una de sus características más importantes es la participación de un gran número de voluntarios que realizan diversas tareas, entre ellas la de guía o control de las visitas en cada uno de los 130 edificios de todo tipo que se abrieron.

Entre estos edificios destacan desde iglesias, equipamientos municipales, edificios emblemáticos antiguos y modernos hasta pisos particulares.

La práctica ha consistido en observar y estudiar como se ha organizado y realizado el festival: Primero como testigo directo y después mediante contacto y entrevistas con la organización y las diversas personas que lo han hecho posible.

El trabajo incide en las prácticas y procesos concretos que se han producido durante la organización y las visitas guiadas a los edificios y en el estudio de cómo es la red de relaciones que se dan entre organizadores, propietarios, voluntarios, organismos públicos, alumnos, profesores, arquitectos, edificios.

La metodología ha consistido en investigar en una primera aproximación al campo, con una mirada fresca y hasta cierto punto ingenua, partiendo del ‘no sabemos’, ‘no conocemos’, observando desde abajo a través de las prácticas cotidianas y concretas, sin ideas previas ya sea críticas o positivas respecto al festival estudiando los pequeños procesos y relaciones que la han permitido que se configure como una realidad establecida, también las formas y artes de hacer observadas respecto a productores, consumidores, usuarios y participantes del festival.